La zurda del 10 puso los latidos

OLE
Como un pancho
En su nueva versión mostaza, Estudiantes pudo quedar como único puntero: dominó, pero le faltó definir el partido. Lanús se avivó, tuvo una y no lo perdonó.
Es puntero. Y esto es lo que cuenta al final de la jornada. De todas maneras, desde los jugadores hasta el último hincha del planeta de Estudiantes deben haberse lamentado por el empate. Porque el Pincha lo tuvo, fue amor y señor de la pelota, tal vez hasta bajó un cambio porque vio que enfrente no pasaba nada. Un error. En esta versión mostaza, fue un pancho. Y Lanús, que había hecho muy poco, se lo empató de guapo, por un pelotazo al área. Increíble.Y la bronca debe durar porque, nuevamente, Estudiantes había plasmado en la cancha ese famoso concepto de equipo, un ideal que persiguen todos los clubes, entrenadores, jugadores e hinchas. Fue interesante la facilidad que tuvo el Pincha, sobre todo en el primer tiempo, para ensamblar engranajes, para acomodar tuercas, para aceitar la máquina aun cuando le faltaran las piezas originales. "La Selección se llevó el corazón de Estudiantes", había dicho el DT. Sin Verón, Braña y Enzo Pérez, ese juego a un toque con una dosis de presión corría riesgo de extinción. No sucedió. Al contrario. Estudiantes se pareció al Estudiantes de siempre. Apenas tardó cinco minutos para acomodarse en la cancha y, luego, sacarle por completo el balón a Lanús.En esa mini primavera, el team de Sabella encontró en Leandro Benítez el mejor reemplazante de Verón. Muy cerca de él, se ubicaron el chiquitín Núñez, velocista, imparable, que pecó de acelerado, porque si hubiese bajado un cambio seguramente habría hecho un descalabro mayor. Por ese sector derecho del ataque pincha, se gestó el mejor juego que se vio en la noche. De todas maneras, Carrusca también demostró movilidad e inteligencia: la mejor muestra fue el 1-0: tiro largo del arquero Taborda, Boselli-Carrusca-Boselli y el Chelo definió de zurda al primer palo. Una joyita del contraataque. Ojo, hay un tema para corregir con urgencia: Estudiantes volvió a ser el dueño de la pelota, pero no generó peligro en igual proporción. ¿De qué sirve tanta superioridad si no termina en la red?Es probable que en Lanús se hayan percatado de esto. Porque luego de un arranque con una excesiva pasividad, salió a apretar un poquito. Mejoró Salvio, se desperezó la dupla de volantes centrales y, con el ingreso de Blanco y Aguirre, trató de empujar. Y, en una ráfaga fugaz, encontró el empate luego de un centro. Demasiado premio. Pero el fútbol es así, y Estudiantes, que había hecho pata ancha, se pasó de pancho. Y con mostaza.

Arco maldito
Marchesín, sustituto de Caranta, terminó mal en un tobillo.
Si bien Agustín Marchesín aguantó los 90 minutos, terminó con fuertes dolencias en el tobillo izquierdo. Y en Lanús temieron que el arquero no pudiera continuar porque Zubeldía ya había realizado los tres cambios. El juvenil se lesionó solo cuando fue a buscar una pelota ante el asedio de Calderón. Y pasado mañana le harán estudios para confirmar si se resintió del esguince. Por ese motivo el arquero jugó infiltrado para no desaprovechar la chance de entrar en lugar del también lesionado Mauricio Caranta, que estará afuera dos meses por una fractura en el húmero de un hombro.

Zapping
Quintana gritó por segunda vez
El festejo a nueve minutos del final fue el segundo grito propio de Carlos Quintana en Primera. Su debut en la red había sido en el Apertura 2008, en la victoria por 4 a 3 frente a Godoy Cruz. Anoche, el juvenil que le dio el empate a Lanús fue titular en lugar del uruguayo Jadson Viera, quien no pudo jugar por un golpe en la rodilla derecha.El Grana sigue sin perder de visitante
Para Lanús todo es más fácil lejos de su casa.
Los del Sur estiraron a cuatro fechas su invicto fuera de la Fortaleza, con tres empates (Argentinos 1-1, Atlético Tucumán 2-2 y Estudiantes 1-1) y una victoria (ante Huracán 2-1) en lo que va del Apertura.
El martes habrá dos pesados en Reserva
El partido irá el próximo martes, a las 15, en el Country de City Bell. Entre los juveniles estarán Alayes y Cellay, quienes se recuperaron de sus lesiones y necesitan sumar minutos de fútbol.

Está todo al revés
Las banderas locales estuvieron dadas vuelta por una interna en el manejo de la tribuna...

La zurda del 10 puso los latidos
Estudiantes no tuvo a Verón, Braña y Pérez, "el corazón del equipo", según Sabella, pero Carrusca no le falló.
Estaba preocupado Sabella. Y tenía motivos. Maradona le sacó a Verón, Braña y Enzo Peréz, nada menos. "Nos falta el corazón del equipo", graficó el técnico que perdió su mediocampo base justo en la previa al partido en el que debía recuperar la punta. Pero consiguió un rápido transplante. Porque entre los huecos que surgieron por las ausencias de los volantes clave para el funcionamiento de Estudiantes apareció Marcelo Carrusca y los latidos de su zurda marcaron el ritmo del fútbol del campeón de América, aunque no le alcanzó para llevarse los tres puntos y quedar solo en el primer lugar de la tabla.El Chelo, dueño de la camiseta número 10, se ganó un lugar para enfrentar al rival que mejor le sienta. Hasta anoche, llevaba convertidos 12 goles en Estudiantes, de los cuales el 25% habían sido justamente a Lanús. Y la cancha de Quilmes fue testigo de una paternidad que se agrandó gracias a una exquisita pared que armó con Boselli, quien le dio el pase justo para que Carrusca pudiera definir con un zurdazo al primer palo del arquero. Por suerte para los de Sabella, el 10 fue preciso en la única situación clara que tuvo porque después Estudiantes controló el balón --ahí fue fundamental el aporte del Chelo y del Chino Benítez-- pero le faltó profundidad para generar más situaciones de gol. Y eso lo pagó caro sobre el final, cuando Lanús tuvo una y no perdonó.Con la punta compartida con Vélez, ahora a Sabella le esperar diez días para preparar la visita a Rosario, donde lo espera Newell's. En el medio pasarán los dos partidos de las Eliminatorias y evaluará cómo regresan sus seleccionados, aunque ya sin tanta preocupación porque comprobó que la zurda de Carrusca late muy bien.

CLARIN
ESTUDIANTES 1 - LANUS 1 : EL EQUIPO DE SABELLA GANABA CON GOL DE CARRUSCA PERO NO PUDO MANTENERLO Y EMPATO QUINTANA FALTANDO NUEVE MINUTOS
Estudiantes volvió a la punta pero el que festejó fue Lanús
El local ahora comparte el liderazgo con Vélez y su rival sumó pensando en la Copa Libertadores.
Lo que parecía una noche dorada para Estudiantes, terminó siendo una incomodidad: tenía el triunfo al alcance de un poco más de solidez; tenía la soledad de la punta a sólo nueve minutos; tenía otra alegría para disfrutar en el camino previo al Mundial de Clubes. Pero no, cuando todo parecía resuelto, Lanús le empató y lo dejó sin nada de eso. Le quitó dos puntos y lo obligó a compartir con Vélez el escalón más alto de la tabla. Para Lanús tuvo otro sabor el desenlace: fue un paso más en el pretendido recorrido rumbo a la Libertadores 2010.Era un desafío relevante para el campeón de América. Este partido venía acompañado de una posibilidad grande: la de demostrar que un equipo, cuando tiene respaldo en el aspecto colectivo, hasta puede prescindir de algunos nombres decisivos. Al equipo de Alejandro Sabella le faltaron cinco titulares (por convocatorias y lesiones). Pero no sólo eso: entre ellos estaba casi todo el mediocampo, incluido su capitán y símbolo, Juan Sebastián Verón. Pero Estudiantes siguió siendo Estudiantes. Más allá de los nombres y hasta de los colores (ayer utilizó una llamativa camiseta dorada, para evocar la conquista de la Copa Libertadores). La idea fue calcada de la que tantos resultados le dio en días cercanos. Un equipo convencido de que puede; que sabe cómo ir tras los pasos de un triunfo. Fue mejor que Lanús en el primer tiempo. Sin brillar, es cierto. Pero con autoridad de equipo sólido, serio. Primero, avisó con dos cabezazos. A los ocho, a través de Mauro Boselli; dos minutos después, con Leandro Desábato, quien obligó a Agustín Marchesín a mostrar toda su agilidad para evitar el grito. Luego, ya a los 22 minutos, construyó una excelente jugada de arco a arco, que tuvo en Boselli al asistidor decisivo y en Marcelo Carrusca al autor del gol.Es difícil, además, jugar contra Estudiantes. Presiona, juega con intensidad, incomoda. Y ante un Lanús sin el juego agradable que exhibió en el último Clausura (lo peleó hasta la penúltima fecha y terminó tercero), supo consolidar su condición de equipo bravo. En la etapa inaugural, el equipo de Luis Zubledía apenas lo inquietó una vez en esos 45 minutos. Lo hizo a través de una buena jugada de Eduardo Salvio (su único intérprete desequilibrante) y una definición de Cristian Menéndez que se fue apenas desviado.Para el segundo tiempo, aunque se hizo más parejo en cuanto al desarrollo, la sensación de solidez del equipo platense no se modificó. Esta vez, sin embargo, le faltó uno de sus rasgos: la contundencia. Tuvo posibilidades para liquidarlo, pero Boselli y Carrusca no supieron cómo, aunque estuvieron cerca. Y eso es un pecado que ante determinadas circunstancias y/o rivales se puede pagar con goles ajenos y con puntos perdidos. Y eso le sucedió a Estudiantes, bajo el cielo del Centenario de Quilmes. Ese Lanús que no encontraba respuestas, que dudaba, que le faltaba profundidad, lo golpeó con el argumento de su tenacidad y de su constancia. Ya habían ingresado Marcos Aguirre, Sebastián Blanco y Santiago Biglieri. Probó todo lo que tenía a disposición. Y dejó a Matías Fritzler como único mediocampista de marca y se fue encima de su rival. Después de chocar, de no encontrar agujeros en la defensa rival, también empezó a tirar centros. Y en uno de esos centros, cuando quedaban nueve minutos, el ingresado Biglieri la mandó al corazón del área y del León, la bajó Santiago Salcedo por primera vez en la noche, la paró Carlos Quintana y definió con un remate fortísimo, de zurda. Sí, lo que parecía imposible, tomaba forma: Lanús le empató y hasta se animó a ir por más ante un Estudiantes que, a esa altura, había perdido la pelota. Y algo mucho peor: dos puntos fundamentales.

La clave
El pecado fue perdonar. Cuando Estudiantes era más no supo liquidar el partido. Y eso lo terminó pagando con un gol rival y dos puntos menos.

La camiseta dorada para el Mundial
Estudiantes sigue festejando la obtención de la Copa Libertadores. Por tal motivo ayer estrenó una camiseta dorada que además tiene escrito en su frente todos los titulos que consiguió el club a lo largo de su historia. La misma utilizará en el Mundial de Clubes a fin de año.

ESTUDIANTES NO CONTO CON VERON, BRAÑA Y ENZO PEREZ, TODOS EN LA SELECCION
Un mediocampo distinto pero con la misma idea
Estudiantes, este Estudiantes que ahora comparte la punta con Vélez, ratificó que tiene un banco de suplentes que da garantías pese a los dos puntos que se le escaparon sobre el final. Los lesionados Damián Albil y Cristian Cellay fueron reemplazados por César Taborda y Germán Ré sin que sus ausencias se notaran. Pero el principal mérito del campeón de América es haber sido superior a un rival calificado como Lanús con un mediocampo al que le faltaron tres de sus cuatro titulares indiscutidos: Enzo Pérez, Rodrigo Braña y Juan Sebastián Verón, convocados por Diego Maradona a la Selección. En sus lugares ingresaron Maximiliano Núñez, Matías Sánchez y Marcelo Carrusca, y el único que no rindió como se esperaba fue el ex Racing, quien hizo extrañar a Braña porque tuvo menos presencia y menos poder de recuperación que el Chapu. En un choque que tuvo la particularidad de que los arcos estuvieron ocupados por habituales suplentes (en Lanús, Agustín Marchesín reemplazó a Mauricio Caranta, lesionado), Estudiantes supo disimular las ausencias que en la semana llenaron de molestia a Alejandro Sabella. "No es lo mismo que te saquen un jugador por línea, que te saquen a casi todos los volantes. Es como si nos sacasen el corazón del equipo", había dicho el DT, no sin antes aclarar que las citaciones de tres de sus hombres le generó alegría.En el medio, allí donde suelen resolverse los partidos, Estudiantes comenzó a cimentar su mejor juego. Un poco porque Leandro Benítez resultó la figura de la cancha en base a su buen manejo de pelota, su precisión y su capacidad para manejar el ritmo del juego. Y otro porque Núñez y Carrusca jugaron un buen partido bien abiertos por las bandas. Carrusca anotó el gol de la apertura con una buena definición y, si bien a su juego le faltó continuidad, exhibió destellos de su reconocido talento.El punto más bajo del mediocampo fue Sánchez, quien jugó como doble cinco junto a Benítez, que se corrió hacia adentro para acompañar al ex Racing en la zona del círculo central. Pero mientras Benítez aportó orden y fútbol, Sánchez no pudo imponer presencia en el círculo central, esencialmente porque tiene menos recorrido y menos quite que Braña. Esta vez, a Estudiantes no le alcanzó para ganar pero sí para volver a estar a la altura de las circunstancias.

De punta en Quilmes
Protesta pinchaEn la tribuna de Estudiantes todas las banderas estuvieron al revés en una medida de protesta de los hinchas locales. ¿El motivo? El CoProSeDe no le permitió ingresar bombos ni trompetas a la hinchada local. Piedrazo a la plateaEn la platea local hubo un incidente que involucró al padre del jugador de Estudiantes, Maximiliano Núñez. En el primer tiempo, una piedra de gran tamaño voló desde la popular de Lanús e impactó en la pierna del familiar del jugador, que estaba sentado en uno de los palcos. El hombre fue asistido por un médico ante la pasividad de la policía. El operativo fue de casi 500 efectivos.Goles desde atrásEn Lanús el bajo nivel de los delanteros se nota. Así lo demuestran sus números en el Apertura, ya que de los últimos cuatro goles a favor, tres fueron convertidos por defensores. Santiago Hoyos en dos oportunidades (ante Atlético Tucumán y Godoy Cruz) y anoche marcó Carlos Quintana. El restante, fue de un volante: Adrián Peralta a Atlético de Tucumán.

LA NACION
Estudiantes era superior, pero se quedó y Lanús descubrió el empate
En Quilmes, el León alcanzó la cima, aunque ahora compartida con Vélez, luego del 1-1 con el equipo granate; Carrusca y Quintana, los goles
Estudiantes era mejor. Corría, jugaba, estaba en la punta en soledad. Sin embargo, se quedó. Fallaron sus piernas. Y en una actitud corajuda, con los influyentes ingresos de Blanco, Aguirre y Biglieri, Lanús se acercó tanto, que logró el empate. Y fue, al final, con cierta justicia. Ahora, sellado el 1-1, el León comparte la cima con Vélez. Y el equipo granate, lejos de su mejor versión, al menos, dio una muestra de personalidad y confianza.
El desarrollo fue intenso, atractivo, con un evidente dominio de Estudiantes desde el comienzo. A pesar de sus bajas, de no contar con Albil, Verón, Braña, Pérez y Cellay, el León mantuvo su fisonomía con temperamento y convicción. Lanús, aquel ejemplo venido a menos en tiempos recientes, tampoco expuso su mejor versión, porque sufre algunas ausencias, como Caranta, como Ledesma y como Blanco, que ingresó en la parte final. En el choque de propuestas generosas, Estudiantes fue mejor, sencillamente, porque se defiende mejor, porque el medio juego expone quite y juego y, porque arriba, en el ataque, tiene dos gladiadores: Boselli y Salgueiro.
Siempre, pero siempre, Estudiantes tuvo el control del juego. Sobre todo, por los costados, con los aportes de Benítez, por el sector izquierdo y Maxi Núñez, por la banda derecha. El León, además, contó con una ayuda vital: los avances, desde la última línea, de Clemente Rodríguez, que no sólo sube por sorpresa por su sector, sino que surge por todo el frente de ataque. En tiempos en que faltan laterales en el seleccionado ?después de Javier Zanetti, luego de la lesión de Pablo Zabaleta?, es otra muestra de que Estudiantes tiene una auténtica selección interna.
Sin embargo, su mejor juego apenas se impuso con el gol, sellado por un zurdazo fantástico del Chelo Carrusca, luego de una pared, como las de antes, con Boselli. De a poco, Lanús apareció con su estilo. Tomó la pelota, se adueñó del desarrollo, pero con una actitud pasiva, sin fuerza colectiva, sin claridad individual. Apagado Toto Salvio ?¿qué le pasará al pichón de crack??, con las intermitencias de Blanco ?entró luego con la clase apagada?, Lanús dependió, en demasía, de su fuego sagrado. Ese que se resiste en marchar, aún cuando el fútbol aparece abatido.
Aún así, siempre fue más Estudiantes. Boselli, más tarde, se perdió un gol increíble. Y de a poco, el vértigo, el ímpetu y la potencia del León se fueron apagando. Lógicamente, porque sus piernas flaquearon. Se cayó físicamente. Y Lanús se dio cuenta que podía: con Biglieri, que avanzó con entusiasmo por el sector derecho, el equipo granate avanzó, aún siendo inferior. Y tuvo una ocasión que no desaprovechó: un envío de Biglieri encontró la cabeza de Salcedo. Y el delantero bajó el balón para que el joven Quintana sellara el 1-1. Un zurdazo tremendo.
Y al final, los dos equipos fueron al frente. Atacaron con potencia. Estudiantes, a pesar de sus piernas vencidas. Lanús, con el ímpetu del empate. Y se quedaron así, igualados. Aunque con sensaciones muy diferentes.
8 son los partidos que Lanús no le puede ganar a Estudiantes. Cuatro derrotas y cuatro empates.

LO DESTACADO
La presentación de la camiseta dorada
Anoche, Estudiantes mostró una nueva camiseta, dorada, con una particularidad: tiene grabados todos sus títulos de aquí y de allá.

LO NEGATIVO
Una agresión de un hincha de Lanús al papá de Núñez
Un barrabrava de Lanús arrojó una baldosa hacia la platea, en donde estaba el papá de Maxi Núñez: sufrió una lesión en una rodilla.

LO CURIOSO
La protesta platense: banderas puestas al revés
La hinchada del León dieron vuelta sus banderas, en señal de protesta contra el Coprosede, que le impide entrar con sus bombos.

Bajas que no pasaron inadvertidas
Verón, Enzo Pérez y Braña son claves en el Pincha
En un equipo como Estudiantes, que juega de memoria cuando puede contar con todos sus intérpretes, la estructura, a veces, se resquebraja cuando las ausencias disminuyen su potencial. Ayer, en la cancha de Quilmes, el Pincha extrañó a varias de sus figuras, que no pudieron jugar por distintos motivos.
Los seleccionados Juan Sebastián Verón, Enzo Pérez y Rodrigo Braña, constituyen el corazón del mediocampo del equipo platense. Verón, por ascendencia sobre el resto de sus compañeros, es el líder natural, el estratego que maneja los hilos. Pérez, por su despliegue no exento de llegada al gol, es un jugador versátil, que se puede adaptar a distintas posiciones, y Braña es la permanente rueda de auxilio, que con su despliegue generoso, tapa todos los huecos. Estudiantes los extrañó en demasía frente a Lanús.
En la valla, el tercer arquero, César Taborda, ocupó el lugar de Damián Albil, el habitual titular, que se recupera del golpe en la rótula derecha, y es muy probable que regrese ante Newell?s, en Rosario, por la 9ª fecha.
Anoche, además, sufrió la baja del lateral uruguayo Juan Manuel Díaz, al que le realizarán estudios por un fuerte golpe en la rodilla derecha.
Hay que recordar que tampoco podrá contar por el resto del torneo con Marcos Angeleri, que se recupera de la rotura de los ligamentos cruzados de la rodilla izquierda que sufrió ante Tigre, en Victoria, por el torneo Clausura. Igual lesión sufrió Agustín Alayes, que volverá pronto.

POPULAR
Cuando Estudiantes durmió Lanús despertó el torneo
Era del Pincha pero selo empataron, y en lapunta se sacan chispas
Estudiantes jugó para ganar y estuvo muy cerca de conseguirlo. Pero no supo asegurar la victoria, se quedó dormido en el final y le permitió a Lanús alcanzar el empate que poner el Apertura al rojo vivo, con dos líderes peleando cabeza a cabeza seguidos por un pelotón de siete equipos separados en una franja de cuatro puntos.Resuelto a cambiar la imagen que ofreció en La Paternal, donde sufrió un impacto anímico tras el gol de Argentinos del que no pudo recuperarse, pisó el campo de Quilmes con la frente en alto y una carga de determinación que no tardó en transformarlo en el gran protagonista de la noche. Sin Verón manejando los tiempos, sin la dinámica de Enzo Pérez y sin el corazón de Braña, Estudiantes definió temprano su personalidad disimulando con jerarquía la ausencia de las piezas clave de su mediocampo habitual.Dominó la pelota en el medio y atacó con mucha gente a un Lanús desdibujado y desconocido, que parece no poder reencontrarse con su mejor funcionamiento después de los sopapos que recibió en el corto camino que lleva recorrido en la actual temporada.Estudiantes rodeó el área de Marchesín, primero, con el poderío de su fuerza aérea. Varios corners seguidos, producto de su generosa ambición, sirvieron para acorralar a un rival que tenía muchos problemas para manejar la pelota, hacía agua en el medio y prosperaba poco en terreno adversario. Un cabezazo alto de Boselli y otro de Desábato que exigió una gran respuesta de Marchesín, fueron un ejemplo de las intenciones pinchas.El local era más. Sólo le faltaba el gol para graficar su superioridad, y llegó después de una combinación vertiginosa y muy precisa entre Boselli -pase perfecto en cortada- y Carrusca -definición letal de zurda al primer palo- promediando la primera parte.Lanús estaba perdido, sin embargo, tuvo una chance clara generada por Salvio (tras una falla de Díaz), centro atrás y aparición de Menéndez para el gol; Matías Sánchez, con gran esfuerzo, volcó la pelota en el corner. Fue la única para el Granate que, en lo que quedó de la parte inicial, siguió en el rol de espectador al que lo obligaba la iniciativa del local.Quintana a fondoLa estructura del partido no cambió demasiado en el segundo tiempo. Estudiantes siguió manejando los tiempos y el territorio, pero ya no con tanta presencia en el área. Así y todo le alcanzaba para ser el único con ideas y determinación. Lanús, lejos de reaccionar, veía incrementar su impotencia con enormes lagunas y golpes a destiempo que opacaban su tarea.Con un par de centros intentó inquietar a Taborda, pero no lo consiguió. Tampoco cuando Zubeldía intentó mover las fibras íntimas con los ingresos de Blanco, Aguirre y Biglieri. Sin embargo, había un único detalle en la columna del haber del Granate: Estudiantes sólo había sacado un gol de ventaja lo que le permitía mantener encendida la llama de la esperanza.Y cuando el partido entraba en la recta final, Lanús infló el pecho con una bocanada de vergüenza, sumó gente para llegar al área rival y, en uno de sus insistentes centros, Biglieri la bajó de cabeza y Quintana metió un zurdazo terrible con lo que empató el partido.Fue empate y no tuvo mucho que ver con el desarrollo del juego. Excesivo castigo para la falta de contundencia del Pincha y un enorme espaldarazo a las expectativas del torneo.

CON LAS HINCHADAS ALTERADAS
Bronca y plateísta herido Un par de circunstancias ligadas a la seguridad alteraron la paz en la noche de Quilmes. El hecho más grave tuvo que ver con un cascotazo que voló desde la tribuna de Lanús y que impactó en medio de la platea local. El proyectil, de considerable dimensión, impactó en la pierna del padre del futbolista de Estudiantes Maximiliano Núñez y le provocó una herida cortante que debió ser atendida en la enfermería.Por otra parte, los hinchas de Estudiantes se quejaron sonoramente por la decisión del personal de prevención que le impidió a la hinchada ingresar con tambores (no pasó lo mismo con los hinchas de Lanús), por lo que colgaron todas sus banderas al revés e insultaron duramente al COPROSEDE y a sus autoridades.

EL ARBITRO
Collado tuvo un buen nivel Javier Collado redondeó una tarea muy criteriosa que, durante buena parte del desarrollo del juego apuntaba a un nivel óptimo. Claro en sus sanciones, agilizando el juego y castigando con rigor reglamentario las indisciplinas de alto grado. Promediando el segundo tiempo participó del fallo más comentado de la noche: su asistente Sergio De Paolo marcó un off side de Núñez (que volvía) y Marchesín dejó la valla para hacer la falta. Pero Collado, acertadamente, dejó seguir la jugada porque le balón había sido impulsado por un defensor de Lanús; por muy poco, con el arco vacío, no fue el segundo del Pincha. De todas formas, en la parte final, su tarea perdió algo de lucidez producto del incremento de las fricciones en el juego.

CRONICA
EL "LEON" NO SE PUDO ESCAPAR
Estudiantes igualó 1-1 frente a Lanús, en el estadio de Quilmes, por la octava fecha del Apertura, y no pudo conseguir el triunfo que lo dejaría solo en la punta. Ahora comparte la cima con Vélez.
El gol lo hizo Marcelo Carrusca a los 22 minutos de juego.
En el complemento, a los 36 minutos, Carlos Quintana, aprovecho la distracción en la defensa para definir con un remate potente dentro del área y alcanzar la igualdad.
Los platenses suman 16 unidades, una menos que el líder Vélez. Por eso, de conseguir una victoria esta noche, se ubicará puntero en solitario. Además, el "Pincha" quiere volver a la senda de la victoria, ya que en su última presentación cayó 1-0 ante Argentinos, en La Paternal.
Por su parte, la visita (suma 8 puntos) viene de obtener su segundo triunfo en el certamen (1-0 a Godoy Cruz) e intentará seguir recuperándose tras unas primeras fechas con vaivenes.
Estas fueron las formaciones iniciales:
Estudiantes: César Taborda; Clemente Rodríguez, Germán Ré, Leandro Desábato, Juan Manuel Díaz; Maximiliano Núñez, Matías Sánchez, Leandro Benítez, Marcelo Carrusca; Juan Manuel Salgueiro y Mauro Boselli. Director técnico: Alejandro Sabella.
Lanús: Agustín Marchesín; Hernán Grana, Santiago Hoyos, Carlos Quintana, Maximiliano Velázquez; Eduardo Salvio, Agustín Pelletieri, Matías Fritzler, Adrián Peralta; Santiago Salcedo y Cristian Menéndez. Director técnico: Luis Zubeldía.
Estadio Centenario de Quilmes (local, Estudiantes).
Arbitro: Javier Collado.